La fecundación in vitro (FIV) y la FIV con microinyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), son dos técnicas de reproducción asistida muy similares, aunque presentan diferencias entre ambas y están indicadas en casos distintos.
Aquí os vamos a explicar cuáles son las principales diferencias entre FIV e ICSI y en qué casos están indicadas.
¿Cuándo está indicada la FIV?
La FIV tradicional es una técnica especial de la reproducción asistida que consiste en la inseminación de un óvulo con una concentración equivalente a 1 millón de espermatozoides tras las capacitación del semen.
Esta técnica está indicada en los siguientes casos:
- Obstrucción tubárica.
- Infertilidad de causa desconocida.
- Fracaso de las técnicas inseminación artificial.
- Factor masculino leve a moderado.
- Endometriosis.
¿Cuándo está indicada la ICSI?
La microinyección o ICSI es una técnica especial de fecundación asistida que consiste en la microinyección de un sólo espermatozoide en el interior del citoplasma del ovocito. La microinyección espermática está indica cuando:
- Factor masculino severo.
- Vasectomías.
- Fallo de fecundación en FIV tradicional.
- DGP.
- Parejas serodiscordantes.
- Óvulos vitrificados.
Diferencias entre las técnicas de FIV e ICSI
El proceso de ambas técnicas es muy similar, de hecho las parejas que se someten a un tratamiento de ICSI o de FIV pasan por el mismo proceso.
Entonces, ¿Cuál es la diferencia entre ambas técnicas?
En la técnica ICSI solo se utiliza un espermatozoide, el que mejor características morfológicas y fisiológicas presenta. Además, para la realización de esta técnica hay que preparar los ovocitos, mediante un proceso que se conoce como la decumulación ovacitaria, que consiste en la eliminación de las células de la granulosa que rodean al ovocito con una solución hialuronidasa.
Sin embargo, para la realización de la fecundación in vitro tradicional se utiliza una concentración de espermatozoides mucho mayor. Es un proceso más «natural», ya que son los espermatozoides quienes fecundan al óvulo y no el embriólogo el que se encarga de elegir el espermatozoide.
En la FIV convencional, se utilizan todos los óvulos que son extraídos de la estimulación ovárica, sean o no maduros, y no son preparados.
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