Muchas de nuestras pacientes acuden a consulta de apoyo psicológico porque no desean hablar de su infertilidad con nadie. A veces, ni siquiera con las personas de su círculo más cercano.
Los sentimientos que nos trasladan suelen ser de vergüenza, culpa, baja autoestima y grandes dosis de tristeza, rabia y frustración. Estas emociones se ven acrecentadas en un entorno que considera la infertilidad y los tratamientos de reproducción asistida un tabú.
- ¿Por qué cuesta tanto hablar de infertilidad y reproducción asistida?
- El tabú en las donaciones de gametos
- Normalizar la reproducción asistida
¿Por qué cuesta tanto hablar de infertilidad y reproducción asistida?
Ser padres o madres se percibe por la sociedad como algo “natural”, y cuando una persona siente que no tiene la capacidad para procrear, es frecuente la sensación de fracaso, y la autoestima, en algunos casos, se ve afectada.
El hecho de tener que recurrir a técnicas de reproducción asistida, hace que muchas personas se sientan vulnerables, y el autoconcepto de “hombre” o “mujer” se tambalea con ideas como “no valgo” para tener hijos.
Además, debemos tener en cuenta que España es un país donde abundan las personas con firmes creencias religiosas, que están en contra de la reproducción asistida.
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Además de vergüenza, algunas personas confiesan miedo a sentirse juzgado (aunque injustamente), por “utilizar estas técnicas”, “por no haberse cuidado con hábitos saludables”, “por no haber recurrido a la maternidad antes”, “por no tener una estabilidad económica o por gastar dinero en tratamientos”, “por estar obsesionada con tener hijos y no relajarse”, “por llevar una vida estresante”, “por hacer el tratamiento sin pareja”, “por haber utilizado anticonceptivos”…
Por estos y otros motivos, muchas personas deciden no hablar de este tema con nadie o casi nadie, y esto contribuye a acrecentar el tabú de la infertilidad.
Si quieres hablar con alguien que entienda tu situación, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. En Fertility contamos con un equipo de profesionales especializados en reproducción asistida que te pueden ayudar a aclarar tus dudas y tomar la mejor decisión para ti y tu familia.
El tabú en las donaciones de gametos
Si la infertilidad en general o la reproducción asistida son temas tabúes, aún lo es más la donación de óvulos, semen o ambos.
En este caso, además de todas las creencias anteriores, se añade el miedo al rechazo por parte del futuro hijo.
Los padres que recurren a una ovodonación, donación de esperma o a una embriodonación temen que la descendencia algún día les considere “menos padres” por haber recurrido a esta técnica, que les afecte a su desarrollo, sufran alguna discriminación por parte de familiares/amigos o quieran conocer a sus donantes.
Estas son las principales razones por las que la donación de gametos es hoy en día uno de los secretos mejor guardados, a pesar de que esos temores son infundados en la mayoría de los casos (hay que aclarar que varios estudios demuestran que el desarrollo evolutivo y social de los niños que conocen sus orígenes no genéticos es normal, no encontrándose diferencias con hijos genéticos).
Cómo aceptar la infertilidad: Hacia la normalización de la reproducción asistida
En España nacen al año nacen más de 13.000 bebés como resultado de una donación de gametos o de embriones (13.133 bebés nacidos en el 2017 según datos de la Sociedad Española de Fertilidad obtenidos a través del Registro SEF 2017).
Sin embargo, la mayoría de nuestros pacientes declaran no conocer a nadie en su entorno procedente de dicha donación. ¿Por qué no se habla de estos temas? O aún peor, se habla para juzgar o criticar.
En las últimas décadas, la sociedad ha invertido recursos en concienciar a la población para evitar embarazos no deseados, pero no se han hecho esfuerzos relevantes por parte de instituciones para prevenir una situación de infertilidad, dar a conocer tratamientos de reproducción o tratar la donación de gametos con la misma naturalidad que otras donaciones, como sangre, órganos o médula.
No estamos, por tanto, preparados para acudir a la maternidad o paternidad de una manera alternativa a la “natural”. Las personas en esta situación deben enfrentarse al miedo o rechazo que produce lo desconocido.
Sin embargo, sí hay que mencionar la labor que están realizando algunas Fundaciones o Asociaciones formadas principalmente por pacientes, en colaboración con algunas clínicas, con el objetivo de divulgar información, darle voz a la infertilidad y servir de apoyo y lugar de encuentro de personas en la misma situación.